Hace unos días cumplí años, 57 concretamente. En otras ocasiones escribía sobre cómo me sentía, reflexionaba sobre el último año, pensaba en voz alta sobre la vida, la muerte, las relaciones personales y otras cuestiones que me obsesionan preocupan.
Hace unas semanas, Anna Gayà compartió un texto de Eva Piquer en Catorze en el que hablaba sobre 52 cosas que había aprendido en 52 años. Y ese artículo fue inspirador y decidí emular el contenido. Antes de empezar con la enumeración, aclarar que no siguen ningún orden y que a veces algunas reflexiones pueden parecer contradictorias, pero es lo que siento:
- Ahora y aquí.
- El motor que nos mueve es la ilusión.
- Las relaciones humanas son la mayor riqueza que tenemos.
- La edad puede ser tu principal enemigo o el aliado más poderoso si quieres que las cosas cambien.
- Si puedes llorar, es que todo está en orden en tu interior.
- Respeta para que te respeten. Empatiza y te sentirás querido.
- Si siempre quieres tener la razón es cuando la pierdes.
- Disfruta de cada momento de sol, las nubes pueden estropearlo todo a los cinco minutos.
- El respeto se gana, nunca se impone, porque cuando así ocurre se transforma en miedo.
- Piensa, luego… vuelve a pensar.
- A veces las intuiciones te llevan al final del laberinto, otras te destrozan la vida.
- Demasiadas veces las palabras adecuadas llegan demasiado tarde.
- El peor contrincante con el que te enfrentes tienes que ser tú mismo; tu mejor amigo, también.
- Para cambiar la percepción de las cosas, antes tienes que cambiar la percepción que tienes de ti mismo.
- La vida es lo que pasa mientras escondes la cabeza.
- Después de la tormenta, a veces llega la calma; otras, una tormenta más fuerte.
- Puedes caerte y levantarte mil veces; pero también caerte una vez y no levantarte nunca más.
- Pedalea, pedalea durante muchos kilómetros. Sufre subiendo y piensa en la siguiente curva, en la siguiente subida, porque llegará un momento en el que todo acabará, empezará la bajada y te olvidarás de dar más pedales. Es cuando habrá llegado el momento de levantar los brazos sin mirar hacia atrás.
- Nota mental: Seguiremos siendo jóvenes hasta el día que muramos.
- A veces, lo mejor es calarse una capucha y dejar que pasen los días.
- Interpreta los silencios, disfruta de una puesta de sol o de un amanecer, fotografía el azul del cielo.
- Es mejor estar solo que tener a las personas equivocadas a tu lado.
- Refúgiate en un libro, en un paisaje, en una canción.
- Si le das muchas vueltas a una idea, tal vez no es una buena idea.
- La mejor manera de reflexionar es cortando verduras a cuadraditos.
- Aprender de las derrotas es una manera de justificar tus frustraciones.
- Siempre hay que leer a Cortázar y sentir envidia de cómo escribe.
- Frente al dolor, relativiza. Ante los contratiempos, valentía.
- El silencio y la soledad pueden ser adictivos, vigila.
- No busques respuestas, encuentra soluciones.
- El tiempo es el asesino más silencioso.
- La felicidad es esa sonrisa interna cuando acabas de vencer a la adversidad.
- Piensa en el momento y actúa al instante antes de que sea demasiado tarde y te arrepientas de no haber hecho nada.
- El amor es el motor que da sentido a nuestras vidas.
- Tomar decisiones es el momento más complejo, sobre todo si piensas que es más fácil equivocarte que acertar.
- Sabes que al principio y al final de tu vida estarás solo, así que rodéate de los mejores y pasa la vida, pasaaaaa la vidaa…
- Siempre aquí y ahora, nunca ya y ahora. Vive el presente y no te disperses en pensar en el futuro, porque éste puede desaparecer en un instante.
- Cuando no tengas la energía ni la valentía para tomar decisiones, pon la pausa, refúgiate en ti mismo y espera el momento adecuado.
- Mi reto diario es aprender una cosa nueva.
- Puedes tardar mucho tiempo en conocerte, pero cuando lo consigas nadie podrá detenerte.
- Que la vida te lleve tan lejos como sueñes.
- Un grano de arena nunca puede generar una tormenta.
- No todo el mundo tiene un precio.
- La vida es flow, reír, disfrutar y sentirte bien. No hay más.
- Si duele, no hace daño. Si hace daño, no siempre duele.
- Nunca es demasiado tarde para vivir tu propia vida.
- No olvides nunca de donde vienes para saber adonde vas.
- Cuando quieras cerrar una puerta, nunca tires la última llave al mar.
- A veces tu vida tiene que detenerse para saber donde estás, si el camino es el correcto y, sobre todo, si las personas que están a tu lado son las adecuadas.
- No aceptar lo que no nos gusta es lo que nos hace sufrir.
- En la pizarra de casa siempre tenemos escrita esta frase: Al final todo va a acabar bien, y si no acaba bien, es que aún no es el final.
- Lo importante en la vida no es lo que nos ocurre, porque eso no podemos controlarlo, sino cómo lo afrontamos.
- Nunca te fíes de esas mañanas radiantes de primavera.
- Los mejores momentos de tu vida se guardan en tu cabeza. Recordar es una manera de revivir emociones, aunque las fotos antiguas pueden destrozar esos momentos que has idealizado.
- El futuro no existe, solo el presente en nuestras vidas. Cada día es hoy.
- Muchas veces volver a un lugar especial, donde te habías sentido feliz, puede producirte una gran decepción.
- Cuando Lucy, Aina y Maria sonríen, todo está en orden.